Guía para olvidar a su machuque

Veamos qué tiene hoy en el tintero nuestra querida tía Clara

El propósito de este blog es y ha sido reflexionar sobre el amor. Sin embargo, es casi imposible hablar de lo bueno sin hacer una referencia, al menos una vez, a lo negativo. Y por eso, queridas sobrinas, la tía Clara está aquí para daros algunos consejos que yo misma hubiera querido escuchar en su época.

1. Tenga una lista de reproducción

La primera canción de esa lista debe tener un mantra poderoso, debe ser una canción que resuma el objetivo, que esté llena de beats y que no nos deje desfallecer. Es evidente que en este punto ya saben de qué canción estoy hablando. No puede ser otra que la interpretada por nuestra segunda reina —la primera es Beyonce— la inigualable, la infaltable, la arrolladora… Dua Lipa con New Rules.

Mamacita, usted se la va a aprender.

¿Que no sabe inglés? No me importa.

Coja un diccionario, coja el Google Translator, búsquela con subtítulos en Youtube. No me interesa. Se aprende el coro y lo canta desde que se levanta hasta que se acuesta. ¿Oyó?

One: don’t pick up the phone, you know he’s only calling coz’ he’s drunk and alone.

Efectivamente. El man la va a buscar a usted cuando sumercé esté más vulnerable, así que nada de contestarle el WhatsApp, mirarle los estados, nada de Facebook, nada de Instagram y menos comentarle las historias.

Por cierto, tengo que hacer un post de lo maravillosa que es la vida sin WhatsApp. Tal vez lo llame «Hay vida después del WhatsApp».

Two: Don’t let him in. You’ll have to kick him out again.

Si usted se ve con él, ya perdió.

Three: Don’t be his friend. You know you’re gonna wake up in his bed in the morning.

Y, por supuesto, tómese un tiempo para usted. No intente ser amiga del man hasta que sus heridas no estén reparadas. ¿Por qué? Porque…

If you’re under him, you ain’t gettin’ over him

Lo siento, esa oración solo me parece chistosa en inglés.

2. Ábrase una cuenta en Duolingo

Usted está en rehab. Así que cambie una droga por otra. No más Instagram, no más mirarle la hora de conexión. Búsquese un hobbie, métase a hacer pole dance, busque videos de cómo hacer mocktails o póngase juiciosa a aprender el idioma para el que se considere negada o el que siempre quiso. Cada vez que le dé por caer en tentación, líbranos señor de los pendejos y una lección de Duolingo: ¡Tarán! Políglota en tres semanas. ¡Que sí!

[I’m unstoppable today] Le aseguro que va a tener a alguien que la persiga, así sea un pajarraco verde:

3. Invéntese un paseo con sus amigas

Váyase a un lugar que sea seguro para llorar, si es que desea hacerlo y con personas que no la juzguen. Ojalá con mucha naturaleza y películas románticas. ¿A dónde? Fácil: a Argentina. Nunca he ido, pero estoy segura de que allá se acaban las tusas. A menos que usted viva precisamente en ese país, en ese caso solo le puedo recomendar Cuba o Canadá… y, con conocimiento de causa, allá sí puedo decir que el caldo de ojo es brutal.

Pero bueno, fuera de chiste, váyase así sea al parque con sus amigas. Si no logró reunirlas a todas, al menos intente irse a tomar un café con una. Todo se puede [With a little help of my friends], pero usted tiene que aceptar la ayuda y pedirla, nadie va a venir a leerle la mente y adivinar que usted está mal.

4. Llame a la niña

Recuerde qué le gustaba hacer a la niña que usted alguna vez fue. ¿Tal vez escribía? ¿Tal vez dibujaba? ¿Tal vez bailaba? Lo que sea que hiciera feliz a su yo del pasado es clave, porque la que se siente más herida es la niña, incluso más que usted de adulta. Si es necesario, haga una lista de los amores pasados desde el inicio de los tiempos y revise de qué maneras usted se ha sentido abandonada, rota, traicionada o incluso humillada. No necesariamente esas heridas han sido causadas por una expareja, pero tal vez por situaciones que requieren revisarse.

5. Evite el autosabotaje

Y créame, esa puede llegar a ser la parte más dura: la de librar batallas mentales de usted contra usted, darle vueltas en su cabeza a algo que no tiene respuesta, rumiar el pensamiento (habla una experta #Fail) o preguntarse «¿Por qué a mí?».

Acepte que usted no tiene control sobre lo que otras personas hacen o dejan de hacer. Usted solo tiene control sobre sus acciones y, a veces, sobre sus pensamientos. Así que antes de darle el consejo positivo que usted no quiere oír porque no está lista e incluso la va a incomodar, déjeme decirle que se refugie en las personas que usted sabe que la quieren y ocupe su mente en cursos, natación, baile, gimnasio, jardinería, hacer cerámica, irse a cine, practicar maternidad de gallinas o cualquier actividad en la que usted esté lo más lejos posible de su celular y concentrada en una sola tarea.

Y finalmente, cuando ya esté saliendo del hoyo, no antes porque hay que permitirse sentir, ahí sí puede ponerse a examinar qué salió mal, cómo hacerlo mejor la próxima vez, para qué le pasó lo que le pasó (no por qué sino para qué) y recuerde que la terapia siempre es una opción y no hay de qué avergonzarse.

Bonus – Caja de herramientas para distraer la mente cuando estoy muy estresada o no quiero pensar

Esta es mi lista personal. Le recomiendo que usted haga la propia y si esta le sirve de inspiración, pues genial.

Aquí van mis Cheap Thrills:

  • Irme a Miniso, DollarCity o tiendas similares a mirar bobadas (no recomendado si usted es de las que compensan los vacíos emocionales con compras)
  • Oler un perfume o un aroma que me guste (Parce, hace unos días les confesé a mis amigas que me encanta el olor a Cresopinol, a gasolina, a trementina… Estoy bien frita)
  • Escribir en hojas de puntitos
  • Reventar plástico de burbujas
  • Irme a comer donitas
  • Hacerme una trenza
  • Irme a Salsa Camará con mi amiga K
  • Hacer una raclette e invitar amigos
  • Hablar con mi primo o mi mejor amiga
  • Cantar en la ducha
  • Poner un video en Youtube y hacer dizque karaoke frente al pc
  • Colorear mandalas
  • Leer poesía o cosas corticas que no me abrumen
  • Irme a un Tostao a tomarme un granizado o a Juan Valdez
  • Irme a comer una paleta
  • Tomarme un vino y escribir
  • Hacer papitas en la freidora y luego tragármelas todas yo solita
  • Verme una comedia romántica que ya me haya visto y chillar si es necesario
  • Ver tiktoks de America’s Got Talent y llorar cuando se sacan el ticket dorado jajaja
  • Darme un baño
  • Ir a comer empanadas

Siete ideas para enfrentar la tusa o la distancia

Ni tusa ni distancia ni consejitos de superación… o bueno, uno que otro…

Antes de que se desate la tormenta, tenga listo el paraguas… Aquí van algunas cosas que me hubiera gustado que me dijeran, y que por desgracia descubrí tarde. Bien pueda comparta…

  1. Ojalá veinte días antes de la partida del ser amado o cuando esté en un momento de tranquilidad, haga una lista de emergencia. Incluya los sitios de Internet que más le gustan y lo motivan. Por favor omita las redes sociales en donde tenga a su pareja o cosas que le recuerden a esta directamente. Dese una vueltica por Duolingo, Lingvist.io, Coursera, los cursos gratis de la Universidad de Harvard o cualquier cosa que lo distraiga. Aprender algo nuevo hará que su cerebro piense menos en la situación dolorosa y retome los procesos de neurogénesis que ya no puede hacer con el sexo. No se espere a que haya pasado un mes para tener un plan, se lo digo por experiencia. Ah, sí, el chocolate amargo también puede estar incluido en esa lista, al igual que reventar envolturas hechas de plástico de burbujas, cantar en la ducha y los nombres de sus amigos más cercanos. Créame, después de contarle una y otra vez su drama al mismo, es posible que ese ya se canse. Eso sí, tenga en cuenta que contar y contar sus tristezas no ayuda a nadie: una cosa es desahogarse y otra muy distinta es quedarse en el hoyo para tener la atención de los demás. En resumen, escriba todo lo que lo haga sentir bien… y tómele una foto con el celular o lleve la lista con usted… Nunca se sabe.
  2. Esto también va a pasar. Quizá hoy duela, quizá mañana siga sintiéndose igual… pero algún día el ciclo tiene que parar. Asegúrese de tomar nota mental (o física) de qué hizo bien, en caso de recaída.
  3. Ya que no puede controlar la situación por completo, intente darse un viajecito… aunque sea cerca de su ciudad. Si tras de entusado está endeudado… el agua aromática con su mejor amiga o mejor amigo siempre será una opción… y de paso también puede darse un bañito de hierbas😂.
  4. Haga algo lindo por alguien más. A veces las acciones anónimas nos ayudan a sentirnos mejor. La próxima vez que vaya a la tienda a comprar una manzana, puede comprar otra para algún desconocido… Tal vez pueda sonreírle a alguien en la calle sin motivo mientras se imagina que esa persona encarna a su futuro amor o su actual pareja en la distancia. Hay miles de cosas que son gratis y pueden alegrar el día de otro. Y si por estos días no soporta a la raza humana —no se culpe, yo tengo días en que no puedo ni verlos o soportarme a mí misma— intente regar alguna mata o saludar a los perros… Después de todo, algún ser vivo debe despertarle un poco de amor.
  5. Lo que sea que haga, no lo haga por las razones equivocadas. Quiero dejar en claro que, si hace algo para olvidar a su expareja o poner en pausa sus pensamientos sobre el amor que no puede tener, tarde o temprano volverá a sentirse miserable. Es como si deseara tapar un agujero en la arena a punta de llenarlo con agua. Funcionará por un tiempo, pero después quedará vacío. Es diferente decir: «Voy a hacer esto para olvidarme del dolor» a «Esta idea me suena».
  6. Entienda a sus amigos, especialmente a los que no saben qué decir. Solo están haciendo lo que creen correcto. Yo también tengo esos amigos que, con buena intención, me dicen: «Son solo unos pocos meses». Juro que sería millonaria si me dieran cien pesos por cada vez que he escuchado esa frase últimamente. Incluso, he recibido el positivismo desmedido en los momentos en los que no me siento capaz de lidiar con los «¡Todo va a estar bien! ¡Qué bella es la vida!». ¿Qué bella es la vida? Mi trasero. Cuando uno está gruñón, está gruñón. No necesita gente que le diga que todo va a estar bien. Uno quiere estar en modo CejasPobladas (ojo al video 😂) y está bien. No hay nada de malo en quejarse un poco… e incluso disfrutar de la quejadera… pero no quedarse ahí. Me costó trabajo entenderlo, pero creo que de algún modo tenía que pasar. Gradualmente, pasaremos de la depresión a la rabia… y de la rabia a reírnos de lo estúpido de la situación, solo hay un par de llamadas a amigas cercanas.

    Shrek amigos felices

  7. Llene el hueco con trabajo, baile, pasatiempos, zumba, libros, teatro, videos chistosos, vaya a la peluquería, hágase las uñas, haga origami, pinte, lave el carro, busque trucos en Internet… mejor dicho: haga lo que le dé la gana lo que le llame la atención. Pero recuerde que «al que le van a dar, le guardan… y al que no, ni haciendo fila».

    Como cuando algo o alguien no es para ti
    Imagen vista en Facebook…